caminando de lado

Cuando se jodió la izquierda

23.02.2012 07:01

A los siete años viví mi primera campaña electoral, mi padre postulaba a regidor de un remoto distrito por izquierda unida, eran las elecciones municipales de 1983, izquierda unida venció en muchos departamentos y distritos del Perú y se afianzó como segunda fuerza electoral después del APRA, así se pensó que se había dado un gran paso para consolidar algo que su propio nombre lo decía, una izquierda unida.
El 11 de setiembre de 1980 se funda Izquierda Unida, Luego de tantos vaivenes de contradicciones e intereses personales de los dirigentes de las diferentes facciones izquierdistas (PCP Unidad, el PSR, PCR Clase obrera, el FRENATRACA, FOCE, UNIR, UDP, y el PCP-Patria Roja), que irónicamente estando en la misma ala política nacional no podían conciliar puntos de vista.
Con el triunfo de 1983 y con la alcaldía de Lima en los bolsillos, se imaginaba que la izquierda unida había dado el primer paso para fortalecerse tras el liderazgo de Alfonso Barrantes Lingán flamante alcalde limeño, pero los desvaríos de siempre empezaron a mellar la aparente estabilidad, más aun cuando los diferentes grupos de izquierda no deslindaron categóricamente con la llamada “lucha armada” iniciada por el PCP Sendero Luminoso y el MRTA, que ya sembraban el terror al interior del país, en consecuencia se identificaba al militante izquierdista como posible terrorista.
Luego Barrantes Perdió con Alan García las elecciones presidenciales de 1985, evadiendo la segunda vuelta, con esto firmando el desmembramiento de la izquierda.
Gracias a todo ello paulatinamente la izquierda fue desapareciendo de la política nacional y en los últimos dieciocho o veinte años, se firmó su desaparición casi total.
Como resultado de un escenario político sin esta ideología, los sindicatos prácticamente han desaparecido, las leyes laborales se han dictado a favor de los empleadores dejando a los trabajadores en total desamparo. Gracias a todo ello las universidades dejaron de ser centros de debate e iniciativas sociales, que brindaban parte del equilibrio a las políticas del gobierno, convirtiéndose en una simple extensión de los colegios donde se forman alumnos cuadriculados sin la capacidad de análisis de la realidad y la proyección social necesaria.
Sacrificios que han logrado estabilidad para el desempeño de una política económica agresiva de libre mercado, dando un esperado progreso para sectores que siempre han estado beneficiados con las distintas políticas que se han tomado a costas del olvido de otros muchos peruanos.
La izquierda nunca volverá si continúan los mismos dirigentes de antaño, si no se renueva y sobre todo si no deja de coquetear totalmente con la estúpida posibilidad de la lucha armada, esa tontería que tanto dolor ha causado en el Perú.
La izquierda debe volver si va a tomar la voz de los que hoy no son representados, volver para equilibrar el ámbito político y ser una alternativa seria para los electores dentro del juego de la democracia.
Pero si va a tratar de volver con los mismos fantasmas de antaño, mejor que se quede muerta.

Sitio de búsqueda

Contacto

Roberto Kleberg Felipe Matías 962070890